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domingo, 13 de octubre de 2013

JOSEF MENGELE: DESMONTANDO MITOS


Hay algunos mitos acerca de Mengele que es bueno erradicar. A eso nos vamos a dedicar hoy. Uno de ellos es que estuvo años protegido por Stroessner en Paraguay y el otro es el conocimiento que había desarrollado en sus años en Auschwitz en el campo de la genética.

La historia real

Josef Mengele (Günzburg, Baviera; 16 de marzo de 1911 – Bertioga, Brasil; 7 de febrero de 1979) era el segundo de los tres hijos de un rico fabricante de maquinaria de Günzburg, Karl Mengele, simpatizante nazi. Estudió medicina y antropología. Durante la guerra sirvió en las SS como oficial médico, primero en la Waffen SS siendo herido en Rostov en 1942. Cuando se recuperó fue destinado a Auschwitz como jefe médico del campo, haciéndose tristemente célebre como el Ángel de la Muerte, y se dedicó a la tortura, maquillada como investigación científica. Era cruel tortura, nada de lo que hizo tenía el más mínimo valor científico, sus conocimientos de genética eran los mismos que cualquier médico de la época. Por lo que la leyenda de sus conocimientos extraordinarios en genética que ampliaría en el exilio son falsos. 

Huida y exilio

Acabada la guerra, fue internado en un campo de prisioneros, pero al dar un nombre falso y como se había negado a que le tatuaran el grupo sanguíneo cuando entró en las SS (cosa que hacían a todos los integrantes de dicha organización a su ingreso) no fue identificado como un SS y fue tratado como un prisionero de guerra normal. Posteriormente escapó a Argentina con ayuda de su familia.

En Argentina dirigió negocios apoyado por su familia desde Alemania y se casó con la viuda de uno de sus hermanos, criando a sus sobrinos. Tuvo una vida tranquila, incluso su nombre aparecía en la guía telefónica de Buenos Aires como José Mengele. Hacia finales de los 50 huyó de Argentina en solitario, dejando atrás a su familia; ya se sentía acosado por los cazanazis y por los servicios secretos de Israel que por esa época secuestrarían a Eichmann. Primero huyó a Paraguay donde estuvo poco tiempo (apenas un par de años) y no recibió apoyo del gobierno sólo de simpatizantes y posteriormente a una hacienda en la selva brasileña. Las historias de protección del gobierno paraguayo son falsas.

Los agentes israelíes parece que estaban sobre su rastro pero los problemas con Egipto hizo al gobierno israelí retirar a los agentes que perseguían a los nazis y emplearlos en vigilar a los egipcios. Eso salvó a Mengele. En algunos informes del servicio secreto israelí se menciona a una persona parecida a Mengele en la zona dónde estaba realmente escondido, lo que hace pensar que estaban sobre el rastro y de no haber existido la crisis egipcia habría seguido el camino de Eichmann.

Mengele se pasó el resto de su vida en Brasil, primero en una hacienda en medio de la selva y finalmente en un pueblo costero. Recibía dinero de su familia alemana que le permitía vivir modestamente y comprar la protección de emigrantes alemanes y simpatizantes nazis en Brasil. Por supuesto no hubo experimentos ni nada parecido, era sólo una rata atemorizada que se escondía. 

Muerte

Finalmente murió mientras nadaba, al parecer sufrió un derrame cerebral y se ahogó. El único consuelo para sus víctimas fue que sus últimos años en Brasil fueron tristes, ya que vivía aislado, casi sin amigos y con miedo a ser descubierto.

Una vez muerto, la familia alemana se relajó y la policía descubrió por escuchas telefónicas su muerte haciendo público el hecho. Su muerte fue conocida por la opinión pública a principios de los ochenta, se encontró su cadáver en un cementerio brasileños, y aunque en un principio hubo dudas, en 1992 los análisis de ADN las despejaron, el cadáver era de Mengele.

Para más detalles, recomiendo la biografía “Mengele: el médico de los experimentos de Hitler” de Gerald L. Posner y John Ware.


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